En un juicio por jurado popular, la Cámara Primera del Crimen
condenó por intento de homicidio a un marido golpeador. Producto del
ataque, la mujer sufrió graves heridas cortantes en el abdomen
Sucedió el 1 de junio de 2014. Eran las 5 de la tarde y Sonia
Lourdes Gutiérrez recién llegaba a su domicilio de Huarpes 2331, de esta
ciudad, cuando su pareja la recibía con un palazo en la cabeza.
En medio de una fuerte discusión, Santos Facundo Quiroga le gritó a la mujer con la que convivía: “¿Querés ver cómo te mato?”.
Aterrorizada, Gutiérrez alcanzó a salir de la vivienda y con sus manos sostenía el picaporte de la puerta de ingreso para impedir que el agresor saliera.
Lo peor estaba por llegar.
De acuerdo a lo que investigó el fiscal de instrucción, Quiroga salió por la puerta de la morada y pertrechado con un cuchillo con una hoja de acero de 7 centímetros dio alcance a su pareja “y con una clara intención de darle muerte le asestó tres puñaladas”.
Uno de los puntazos pudo ser atajado por una de las manos de la mujer, pero los otros dos dieron en su abdomen, derribando a la víctima y poniendo en grave riesgo su vida.
Acto seguido, el agresor se dio a la fuga pero fue detenido por la Policía en el sector de calle Mozart al 400.
Este grave episodio de violencia familiar fue juzgado por la Cámara Primera del Crimen durante un juicio por jurado que se desarrolló a lo largo de la semana pasada.
El tribunal integrado por las vocales Virginia Emma, Nora Sucaría y Lelia Manavella, y un jurado popular, terminó aplicándole a Quiroga 11 años de cárcel por el delito de homicidio calificado por el vínculo, en grado de tentativa.
Esa había sido la pena que el fiscal de Cámara Julio Rivero había solicitado en su alegato, en tanto que el abogado defensor de Quiroga, el asesor letrado Santiago Camogli, había pedido que se recaratule la causa como “lesiones graves agravadas por el vínculo” y se lo condene a 4 años y medio de cárcel.
Con el voto mayoritario de nueve jurados y vocales contra uno, el tribunal declaró la culpabilidad del violento esposo y le aplicó la misma pena que había reclamado el fiscal.
Además, la jueza Virgina Emma dispuso que el Servicio Penitenciario Número 6 le provea al penado de la asistencia psicológica que corresponda de acuerdo a la naturaleza del grave delito que perpetró.
En medio de una fuerte discusión, Santos Facundo Quiroga le gritó a la mujer con la que convivía: “¿Querés ver cómo te mato?”.
Aterrorizada, Gutiérrez alcanzó a salir de la vivienda y con sus manos sostenía el picaporte de la puerta de ingreso para impedir que el agresor saliera.
Lo peor estaba por llegar.
De acuerdo a lo que investigó el fiscal de instrucción, Quiroga salió por la puerta de la morada y pertrechado con un cuchillo con una hoja de acero de 7 centímetros dio alcance a su pareja “y con una clara intención de darle muerte le asestó tres puñaladas”.
Uno de los puntazos pudo ser atajado por una de las manos de la mujer, pero los otros dos dieron en su abdomen, derribando a la víctima y poniendo en grave riesgo su vida.
Acto seguido, el agresor se dio a la fuga pero fue detenido por la Policía en el sector de calle Mozart al 400.
Este grave episodio de violencia familiar fue juzgado por la Cámara Primera del Crimen durante un juicio por jurado que se desarrolló a lo largo de la semana pasada.
El tribunal integrado por las vocales Virginia Emma, Nora Sucaría y Lelia Manavella, y un jurado popular, terminó aplicándole a Quiroga 11 años de cárcel por el delito de homicidio calificado por el vínculo, en grado de tentativa.
Esa había sido la pena que el fiscal de Cámara Julio Rivero había solicitado en su alegato, en tanto que el abogado defensor de Quiroga, el asesor letrado Santiago Camogli, había pedido que se recaratule la causa como “lesiones graves agravadas por el vínculo” y se lo condene a 4 años y medio de cárcel.
Con el voto mayoritario de nueve jurados y vocales contra uno, el tribunal declaró la culpabilidad del violento esposo y le aplicó la misma pena que había reclamado el fiscal.
Además, la jueza Virgina Emma dispuso que el Servicio Penitenciario Número 6 le provea al penado de la asistencia psicológica que corresponda de acuerdo a la naturaleza del grave delito que perpetró.
Fuente: Puntal 8.09.15
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