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25 jun 2014

Megajuicios por los crímenes de “La Perla” y un testimonio que da cuenta de como actúo buena parte de nuestra sociedad riocuartense

“No dejaban a los niños juntarse conmigo por ser hija de prófugos”

Clarisa, la hija de José Alfredo “Peco” Duarte, riocuartense desaparecido en la dictadura, declaró en Córdoba y relató la discriminación que sufrió por parte de sus vecinos luego del secuestro de su padre
En una nueva audiencia por el megajuicio de La Perla, Clarisa Duarte, hija de José “Peco” Duarte, declaró ante el tribunal e hizo referencia a todo lo que sufrió su familia con el secuestro del riocuartense durante la dictadura. “Mi madre era un ente”, aseguró en su declaración, respecto de cómo los afectó la situación.

Clarisa Duarte declaró por el secuestro y la desaparición de su padre, José Alfredo, hechos que se encuentran en el marco de la causa Barreiro. Fue la testigo N° 317 del juicio que se viene desarrollando en Córdoba capital y que ya lleva más de 150 audiencias. Su crudo relato se inscribió en los testimonios de los hijos, dando cuenta de cómo el terrorismo de Estado marcó dolorosamente la infancia de una generación.

Clarisa relató el recuerdo del secuestro de su padre, el 1 de marzo de 1976. Él militaba en la Juventud Peronista y trabajaba en el comedor de la Universidad Nacional y luego lo hizo en la imprenta de la casa de altos estudios. De acuerdo a su descripción, hacía trabajo barrial, en sectores humildes de la ciudad, y trataba de luchar contra el flagelo del analfabetismo.

En el recorrido de su narración destacó la historia de su madre, quien quedó atrapada en la angustia y el miedo, por lo que terminó internada durante largo tiempo. “Mi madre era un ente”, dijo entre lágrimas y responsabilizó al terrorismo de Estado por haberle robado la posibilidad de tenerla cerca.

“El terrorismo de Estado hizo que los vecinos no dejaran a sus hijos juntarse conmigo porque yo era hija de prófugos”, dijo y le mostró al presidente del tribunal una copia de su certificado oficial de jardín en el cual estaba inscripta como “hija de prófugos”.

“Peco” fue perseguido por su militancia social y la familia debió escaparse de Río Cuarto, parando en diferentes casas de familiares y amigos. Él tenía 27 años en ese entonces, y su hija Clarisa solamente 1.

La familia se fue a vivir a Córdoba, donde en marzo del ‘76 una patota militar secuestró a Duarte y nunca más hubo noticias de él. Sólo por información más reciente se supo que podría haber estado detenido en el centro clandestino campo “La Ribera”.

Luego de la desaparición de “Peco”, la madre de Clarisa estuvo muy enferma y fue internada primero en el Hospital de Río Cuarto y luego en el Hospital Neuropsiquiátrico de Córdoba. La testigo asegura que guardó silencio y no decía que su madre estaba viva para protegerla. Sólo el círculo íntimo de su familia sabía que ella estaba allí. Clarisa, en tanto, se quedó a cargo del cuidado de su abuela materna.

Más testimonios


En otro de los testimonios, declaró Oscar Antonio Rossetti, quien estuvo detenido desde el 19 de marzo del 76 hasta fines del ‘82. El ex preso marcó como inicio de su militancia la detención de su hermana, Marta Rossetti de Arqueola (asesinada en la UP1) quien había sido detenida en el año ‘75 y trasladada Devoto. Oscar Rossetti formaba parte de la comisión de familiares por defensa de los presos políticos.

El testigo también declaró en el marco de la causa Barreiro, y afirmó haber estado en el centro clandestino de detención “La Perla”, donde fue interrogado y torturado por su militancia. Recordó haber visto a otras personas en ese centro clandestino y relató cómo fue su sufrimiento en su paso por “la cuadra”.

Luego de relatar su propio secuestro y detención, le preguntaron sobre la detención de su hermana en el año ‘75, cuando fue llevada primero al D2 y luego a la UP1. Le preguntaron sobre la conocida solicitada que Marta Rossetti publicó dando a conocer que había visto detenidos a los hermanos Chabrol en el D2. Esta solicitada se encuentra en la actualidad como muestra y testimonio en el recorrido del Museo de Sitio del Archivo Provincial de la Memoria donde funcionaba el D2.

Fuente:Puntal 25.06.14

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