Brasil 2014 . Ezequiel Lavezzi y la historia del hombre del momento

Será titular mañana contra Suiza. Le dicen “Pocho” por un perro que era “rompebolas” como él. Fue electricista y ahora es un “sex symbol”. Le llegó la oportunidad de su vida en la selección.
 
Por Guillermo Puente

Algo tiene. Es diferente al resto. Se destaca. Sobresale. No es Lionel Messi. Por estos días, el que ocupa los espacios en los medios es Ezequiel Lavezzi. Es que no pasa inadvertido. Ni dentro de la concentración en Cidade do Galo ni fuera de ella. Jugando poco se transformó en el sex symbol de la selección. Ahora, será titular mañana contra Suiza por la lesión de Sergio Agüero y porque se lo ganó.
Siempre está sonriendo. A punto de hacerle una broma al que tiene al lado. Es uno de los que más muestra la intimidad del grupo a través de las redes sociales. Y su sobrenombre dice muchas cosas de él desde la infancia. ¿Por qué le dicen “Pocho”? Él mismo lo contó alguna vez: “Mi hermano tenía un perro, ‘Pochoclo’. Era rompebolas, ja. Como yo era igual, me quedo el mismo apodo”.
Este santafesino de 29 años (nació el 3 de mayo de 1985 en Villa Gobernador Galvez) comenzó a jugar al fútbol el club Coronel Aguirre de su ciudad. Luego pasó a las inferiores de Rosario Central, donde quedó libre a los 16 años.
Fue a probar suerte al Pescara de Italia, se tuvo que volver por problemas con su pasaporte, e intentó en las inferiores de Boca, pero no quedó. Ahí decidió dejar el fútbol y empezó a trabajar de ¡electricista! Así ayudaba a su familia. Hasta que su hermano, el mismo del perro “Pochoclo”, lo convenció para que vuelva a intentarlo. Y quedó en Estudiantes de Buenos Aires, donde debutó con 17 años en la B Metropolitana.
Luego vendría la historia más conocida. Su pase lo compró el Genoa de Italia y lo cedió a San Lorenzo (donde jugó del 2004 al 2007). Después pasó al Napoli (2007 al 2012) y desde el 2012 se desempeña en el Paris Saint Germain de Francia.
El de mañana en San Pablo será su partido número 34 en la selección mayor, en la cual convirtió cuatro goles. Comenzó su relación con el equipo nacional en la era de Alfio Basile (2007) y luego estuvo con Diego Maradona, Sergio Batista y ahora con Alejandro Sabella. Además, integró el plantel que ganó la medalla de oro en los Juegos Olímpicos de Beijing 2008.

Una tarea sacrificada
Lavezzi no tendrá una tarea sencilla mañana contra Suiza. Con la idea de reforzar el sector derecho del equipo, Sabella le pidió al “Pocho” que juegue como volante por derecha. Tendrá la misión de ayudar a Mascherano y a Gago en el medio campo, y a Zabaleta en el lateral. La tarea del exelectricista será sacrificada, porque deberá retrasarse y sumarse al ataque también. Él no tiene problemas y tratará de aprovechar su momento en la selección.
Para mañana, Sabella piensa parar a Romero; Zabaleta, Fernández, Garay y Rojo; Lavezzi, Gago, Mascherano y Di María; Messi e Higuaín. El sistema de juego será flexible. Una mezcla del 4-3-3 que quieren todos y un 4-4-2 más equilibrado.
Además, por las dudas, ayer se practicaron penales en Cidade do Galo. En este Mundial lleno de sorpresas, la ejecución desde los 12 pasos no puede sorprender a los argentinos. Lavezzi, el hombre del momento, está preparado.

Fuente: La Voz 30.06.14