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| Esta demanda sigue vigente hoy |
La edad mental de Sabena era inferior a su edad cronológica
El testimonio del doctor Javier Sanabria -que atendió al joven
desde los 8 años- reforzaría la hipótesis de que era una persona
fácilmente influenciable. Ayer, también declararon una ex novia de
Nicolás y el comisario Hein
Con la presencia de tres nuevos testigos continuó ayer en los
tribunales riocuartenses el juicio a José Francisco “Yaca” Vargas, por
privación de libertad.
A primera hora de la mañana, prestó declaración el médico neuropediatra Javier Sanabria quien afirmó que Nicolás Sabena tenía un leve desfasaje entre su desarrollo mental y su edad cronológica.
El testimonio del especialista que atendió a Sabena desde que contaba con 8 años hasta el año 2005 fue destacado por el abogado de la querella, René Bosio, porque “viene a redondear o confirmar algunas hipótesis que estábamos manejando como, por ejemplo, que Nicolás sufría un pequeño trastorno que hacía que el chico tuviera una edad cronológica que no se correspondía con su edad mental. Si bien tenía 21 años, mentalmente su edad era menor. Esto hacía a su vez que Nicolás fuera una persona influenciable y manejable que no podía medir los riesgos”.
“Otra definición importante del doctor Sanabria fue que su impresión es que Nicolás no podía irse de su casa sin dar noticias por tanto tiempo, él dijo que dadas sus características no pudo haberse ausentado por tanto tiempo sin dar alguna señal”, comentó Bosio.
Sanabria también señaló que, mientras él lo atendió, Nicolás no había dado indicios de ser un consumidor de drogas. Y tampoco en ningún momento el joven le dio a entender o le confió que fuera víctima de un maltrato por parte de sus padres. “Más bien, dijo todo lo contrario, definió a la madre de Nicolás como una persona que siempre lo acompañaba y se preocupaba por la salud de su hijo”, manifestó el abogado querellante.
-Sanabria coincidió en ese sentido con lo que habían dichos las profesionales en la anterior jornada del juicio.
-Exactamente, por eso digo que para nosotros este testimonio es muy importante también porque lo dan los profesionales. Es una conclusión calificada y coincide con el estudio retrospectivo que hizo la gente de la Policía Judicial. Esto nos va dando una pauta respecto de la personalidad de Nicolás como a lo que pudo haber ocurrido con su desaparición.
-¿Qué aportó el entonces encargado de Drogas Peligrosas, el comisario Hein?
-Simplemente tuvo intervención a raíz de que algunos remiseros dijeron haber llevado a Nicolás a algunos lugares donde suponían que podía comprar estupefacientes. Dijo que se hicieron los allanamientos y no se encontró nada y sobre todo le preguntamos si en esa investigación lograron algo vinculado a la desaparición de Nicolás y respondió que no.
-La defensa de Vargas dijo que Hein nunca investigó a esa familia por narcotráfico.
-Sí, fue así y creo que esto es fácilmente deducible porque si se los hubiese investigado seguramente los habrían detenido y habrían podido comprobarlo.
La ronda de testigos de ayer concluyó con la presencia de una joven llamada Cindi, quien fuera la última novia oficial que los padres de Nicolás conocieron.
La chica estuvo vinculada al joven hasta el año 2007 y en el año y medio que duró su relación solía visitar la casa de la familia Sabena.
“Esa joven dijo que, por el conocimiento que ella tenía de Nicolás, no cree que haya podido marcharse con la intención de no regresar más y agregó que, en su opinión, Nicolás no está más entre nosotros”, comentó Bosio.
El juicio continuará el próximo martes en la Cámara Segunda del Crimen, a cargo de los jueces Andruet, González Castellanos y Mola.
A primera hora de la mañana, prestó declaración el médico neuropediatra Javier Sanabria quien afirmó que Nicolás Sabena tenía un leve desfasaje entre su desarrollo mental y su edad cronológica.
El testimonio del especialista que atendió a Sabena desde que contaba con 8 años hasta el año 2005 fue destacado por el abogado de la querella, René Bosio, porque “viene a redondear o confirmar algunas hipótesis que estábamos manejando como, por ejemplo, que Nicolás sufría un pequeño trastorno que hacía que el chico tuviera una edad cronológica que no se correspondía con su edad mental. Si bien tenía 21 años, mentalmente su edad era menor. Esto hacía a su vez que Nicolás fuera una persona influenciable y manejable que no podía medir los riesgos”.
“Otra definición importante del doctor Sanabria fue que su impresión es que Nicolás no podía irse de su casa sin dar noticias por tanto tiempo, él dijo que dadas sus características no pudo haberse ausentado por tanto tiempo sin dar alguna señal”, comentó Bosio.
Sanabria también señaló que, mientras él lo atendió, Nicolás no había dado indicios de ser un consumidor de drogas. Y tampoco en ningún momento el joven le dio a entender o le confió que fuera víctima de un maltrato por parte de sus padres. “Más bien, dijo todo lo contrario, definió a la madre de Nicolás como una persona que siempre lo acompañaba y se preocupaba por la salud de su hijo”, manifestó el abogado querellante.
-Sanabria coincidió en ese sentido con lo que habían dichos las profesionales en la anterior jornada del juicio.
-Exactamente, por eso digo que para nosotros este testimonio es muy importante también porque lo dan los profesionales. Es una conclusión calificada y coincide con el estudio retrospectivo que hizo la gente de la Policía Judicial. Esto nos va dando una pauta respecto de la personalidad de Nicolás como a lo que pudo haber ocurrido con su desaparición.
-¿Qué aportó el entonces encargado de Drogas Peligrosas, el comisario Hein?
-Simplemente tuvo intervención a raíz de que algunos remiseros dijeron haber llevado a Nicolás a algunos lugares donde suponían que podía comprar estupefacientes. Dijo que se hicieron los allanamientos y no se encontró nada y sobre todo le preguntamos si en esa investigación lograron algo vinculado a la desaparición de Nicolás y respondió que no.
-La defensa de Vargas dijo que Hein nunca investigó a esa familia por narcotráfico.
-Sí, fue así y creo que esto es fácilmente deducible porque si se los hubiese investigado seguramente los habrían detenido y habrían podido comprobarlo.
La ronda de testigos de ayer concluyó con la presencia de una joven llamada Cindi, quien fuera la última novia oficial que los padres de Nicolás conocieron.
La chica estuvo vinculada al joven hasta el año 2007 y en el año y medio que duró su relación solía visitar la casa de la familia Sabena.
“Esa joven dijo que, por el conocimiento que ella tenía de Nicolás, no cree que haya podido marcharse con la intención de no regresar más y agregó que, en su opinión, Nicolás no está más entre nosotros”, comentó Bosio.
El juicio continuará el próximo martes en la Cámara Segunda del Crimen, a cargo de los jueces Andruet, González Castellanos y Mola.
Fuente : Puntal 18.06.14
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