El narcoescándalo por sus proyecciones, es una causa que conviene seguir. Desde allí se puede apreciar el oscuro entramado que compromete y mucho a las fuerzas vivas de la provincia y la interna de los poderes que nos gobiernan, en un camino que esperamos nos lleve a la verdad. En esta nueva instancia judicial el fiscal federal Senestrari imputó al fiscla provincial Drazile. Leamos la información tal lo publica La Voz, y si Ud tiene un tiempo, mire el video que le acercamos :
El fiscal federal Nº 1, Enrique Senestrari, quien lleva adelante la investigación de la causa conocida como narcoescándalo, en cuyo contexto se produjo la muerte del policía de Drogas Peligrosas Juan Antonio Alós, resolvió imputar al fiscal provincial Emilio Drazile del supuesto delito de “violación de los deberes de funcionario público”.
Drazile, fiscal provincial de Alta Gracia, tomó el caso Alós el día en que se descubrió su muerte, en la madrugada del 7 de septiembre del año pasado, cuando fue encontrado arriba de un auto no identificado de Drogas Peligrosas, muerto de un balazo en la cabeza, camino a Bosque Alegre.
Desde un comienzo, investigó el caso como un suicidio y terminó por ordenar el cierre de la causa. Sin embargo, en mayo, la Corte Suprema de Justicia de la Nación hizo caso al criterio de la procuradora General Alejandra Gils Carbó, que había criticado al funcionario judicial, y ordenó que el expediente pasara a manos del fiscal federal Senestrari, quien lo había reclamado.
Luego, la viuda de Alós, la también policía Roxana Luna, denunció al fiscal Drazile, por que lo que Senestrari abrió un tercer expediente: al narcoescándalo y la muerte de Alós se sumó la denuncia contra Drazile por presunto mal desempeño. En esta última causa, resolvió imputarlo.
Según el abogado de Luna, Carlos Nayi, esta resolución tuvo en cuenta diferentes puntos. “Hubo una cadena de irregularidades, como que Drazile apagó él el motor del auto sin esperar que llegaran los expertos del Gabinete de Policía Judicial, luego entregó el auto a Drogas Peligrosas y dejó que se quemara la ropa”, enumeró Nayi.
En ese sentido, el letrado insistió en que si se alteró la escena del crimen desde el momento en que se halló el cuerpo, “todos los peritajes posteriores pueden haber sido inducidos al error”.
Por su parte, el abogado de Drazile, Marcelo Touriño, cuestionó con
dureza la imputación resuelta por Senestrari: “No hay ninguna sorpresa,
se trata de una actitud absurda, antijurídica y contra el sentido
común”.
“¿Cómo puede establecer Senestrari si Drazile actuó mal si aún en la causa en la Justicia federal no se dictaminó de qué manera murió Alós?”, se preguntó y respondió: “Si luego se concluye que fue suicidio, ¿en qué van a decir que estuvo mal Drazile?”.Para Touriño, la imputación se trató de “una represalia jurídica ante la derrota sufrida por Senestrari en la Cámara Federal”.
En un fallo conocido días atrás, se dispuso que Drazile pudiera participar de las medidas ordenadas en torno a la investigación por la muerte de Alós, cuestión a la que se oponía el fiscal federal.
Por último, Touriño recitó una serie de cuestionamientos hacia Senestrari: “Tuvo un detenido por trata al que el juez (José María) Pérez Villalobo tuvo que pedirle disculpas cuando lo absolvieron, ordenó allanamientos a lugares equivocados, se le cayó la causa por el secuestro contra (Rafael) Sosa, y en la causa de Alós no hay una sola prueba que plantea alguna duda de que no fue suicidio”.
Fuente: La Voz 17.09.14
NO DEJAR DE VER : Programa ADN especial sobre la muerte del policía Juan Alós.
Imputan a Drazile por supuestas irregularidadesEl fiscal federal Nº 1, Enrique Senestrari, quien lleva adelante la investigación de la causa conocida como narcoescándalo, en cuyo contexto se produjo la muerte del policía de Drogas Peligrosas Juan Antonio Alós, resolvió imputar al fiscal provincial Emilio Drazile del supuesto delito de “violación de los deberes de funcionario público”.
Drazile, fiscal provincial de Alta Gracia, tomó el caso Alós el día en que se descubrió su muerte, en la madrugada del 7 de septiembre del año pasado, cuando fue encontrado arriba de un auto no identificado de Drogas Peligrosas, muerto de un balazo en la cabeza, camino a Bosque Alegre.
Desde un comienzo, investigó el caso como un suicidio y terminó por ordenar el cierre de la causa. Sin embargo, en mayo, la Corte Suprema de Justicia de la Nación hizo caso al criterio de la procuradora General Alejandra Gils Carbó, que había criticado al funcionario judicial, y ordenó que el expediente pasara a manos del fiscal federal Senestrari, quien lo había reclamado.
Luego, la viuda de Alós, la también policía Roxana Luna, denunció al fiscal Drazile, por que lo que Senestrari abrió un tercer expediente: al narcoescándalo y la muerte de Alós se sumó la denuncia contra Drazile por presunto mal desempeño. En esta última causa, resolvió imputarlo.
Según el abogado de Luna, Carlos Nayi, esta resolución tuvo en cuenta diferentes puntos. “Hubo una cadena de irregularidades, como que Drazile apagó él el motor del auto sin esperar que llegaran los expertos del Gabinete de Policía Judicial, luego entregó el auto a Drogas Peligrosas y dejó que se quemara la ropa”, enumeró Nayi.
En ese sentido, el letrado insistió en que si se alteró la escena del crimen desde el momento en que se halló el cuerpo, “todos los peritajes posteriores pueden haber sido inducidos al error”.
Disconforme
“¿Cómo puede establecer Senestrari si Drazile actuó mal si aún en la causa en la Justicia federal no se dictaminó de qué manera murió Alós?”, se preguntó y respondió: “Si luego se concluye que fue suicidio, ¿en qué van a decir que estuvo mal Drazile?”.Para Touriño, la imputación se trató de “una represalia jurídica ante la derrota sufrida por Senestrari en la Cámara Federal”.
En un fallo conocido días atrás, se dispuso que Drazile pudiera participar de las medidas ordenadas en torno a la investigación por la muerte de Alós, cuestión a la que se oponía el fiscal federal.
Por último, Touriño recitó una serie de cuestionamientos hacia Senestrari: “Tuvo un detenido por trata al que el juez (José María) Pérez Villalobo tuvo que pedirle disculpas cuando lo absolvieron, ordenó allanamientos a lugares equivocados, se le cayó la causa por el secuestro contra (Rafael) Sosa, y en la causa de Alós no hay una sola prueba que plantea alguna duda de que no fue suicidio”.
Fuente: La Voz 17.09.14
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