El ex policía y condenado a prisión perpetúa por
crímenes de lesa humanidad cometidos en la última dictadura, Miguel
Etchecolatz, dijo ante el tribunal platense que "por mi cargo y
jerarquía me tocó matar, pero no sé cuánta gente", y recordó el juicio
en el que Jorge Julio López prestó declaración en su contra.
Etchecolatz,subjefe de la policía bonaerense durante la dictadura, declaró ayer ante el Tribunal Oral
Federal Nº1 de La Plata, en el marco de las audiencias del juicio que se
investiga la participación de 15 militares y un ex funcionario civil
por el secuestro y tortura de detenidos alojados en el centro
clandestino La Cacha, ubicado en las afueras de la capital bonaerense.
El represor sostuvo que "yo no salía a matar a
alguien para quitarle la vida, era porque había llamados denuncias de
vecinos, que veían algo raro en el lugar, le mandaba patrullas y ahí
estaba la vida de uno u otro".
En el marco de la causa, se juzga la detención
ilegítima de unas 128 personas alojadas en La Cacha, que estaba ubicado
en el predio lindero a la cárcel de Olmos, en las afueras de La Plata.
En un duro testimonio, ante la presencia de
familiares de víctimas de la dictadura, el represor sostuvo que "esos
enfrentamientos son objeto y encuadre de una situación de guerra, dicha
por los mismos terroristas. Acá no era por una cuestión de antipatía,
estábamos exponiendo nuestras vidas".
Al exponer ante el Tribunal Oral Federal Nº1,
presidido por el juez Carlos Rozanski e integrado por Pablo Jantus y
Pablo Vega, Etchecolatz dijo que "la policía de la provincia tuvo que
ofrecer más de 160 muertos", y preguntó a los fiscales presentes: "¿No
conocen esa situación tan cruenta? ¿Por qué se oculta?".
"Yo no sé los años que me quedan de vida para mí,
pero creo que el talonario se me va acortando, no me importan cuánto
hagan de mí persona porque estoy más allá de mi persona, pero sí me
importa que se respeten la Constitución y las leyes", dijo en su defensa
al estar imputado como coautor de dos homicidios ocurridos en el barrio
platense de Tolosa el 9 de noviembre de 1976.
En ese marco, dijo que "detrás mío hay una figura de
un señor (Jorge Julio) López, desaparecido después de haber prestado
declaración, el señor López mintió, como consta en varios lugares,
cuando dice que vio que yo mandé a fusilar, ese día estuve internado".
Entre los casos que se investigan están los de Laura
Carlotto, hija de la titular de Abuelas de Plaza de Mayo, Estela de
Carlotto, y la privación ilegítima de la libertad de Antonio Bautista
Bettini, padre de Carlos Bettini, actual embajador argentino en España.
Fuente: La Capital 6.02.14
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Los comentarios publicados son de responsabilidad exclusiva de quien los envíe. No siempre refleja nuestra opinión.