Se inicia la etapa final del juicio oral contra los dueños de importadoras farmacéuticas que trajeron al país 15 toneladas de droga. La defensa culpa a la Sedronar
Comienza la ronda final del juicio oral y público que investiga la rama empresarial de la megaimportación de unas 15 toneladas de efedrina entre 2006 y 2008, derivada luego al narcotráfico. Para esta semana están previstos los alegatos y se estima que, hacia fin de mes, habría una sentencia. Fuentes judiciales adelantaron a PERFIL que la fiscalía pediría “penas muy fuertes” para todos los procesados.
En la causa, a cargo del Tribunal Oral Federal N° 4, se investiga a Alfredo Abraham, Alberto Salvador “Negro” López, Guillermo Manfredi y Josué Fuks (prófugo de la Justicia), acusados de ingresar al país la efedrina –precursor químico para producir metanfetaminas– a través de las empresas FASA (Farmacéuticos Argentinos) y Prefarm. Este viernes 8 está previsto el alegato del fiscal Diego Luciani, aunque la agenda podría dilatarse unos días.
FASA solicitó la importación de 17.200 kilos, de los cuales se comprobó que 9.800 ingresaron al país. Prefarm solicitó 5.500 kilos, que fueron autorizados por la Sedronar, de los cuales 1.900 ingresaron por intermedio de un supuesto testaferro de estos empresarios. “FASA llegó a pedir la compra de 3 mil kilos en un día”, grafica una fuente de la causa. “Hay pruebas suficientes y testigos. Existen comunicaciones telefónicas entre Abraham y Forza (una de las víctimas del triple crimen de General Rodríguez)”, agregó la fuente.
Según pudo averiguar este diario, las defensas intentarían desligar la responsabilidad en la Sedronar. En rigor, la importación de la efedrina se produjo con la autorización del organismo, pero lo que se investiga es su posterior comercialización ilegal. Que la jueza Servini de Cubría haya procesado a José Granero, a cargo de la Sedronar, y a otros dos funcionarios, podría pesar indirectamente en este caso. La lógica es que, si los funcionarios son partícipes del delito de comercio de estupefacientes, los importadores también lo serían.
Comienza la ronda final del juicio oral y público que investiga la rama empresarial de la megaimportación de unas 15 toneladas de efedrina entre 2006 y 2008, derivada luego al narcotráfico. Para esta semana están previstos los alegatos y se estima que, hacia fin de mes, habría una sentencia. Fuentes judiciales adelantaron a PERFIL que la fiscalía pediría “penas muy fuertes” para todos los procesados.
En la causa, a cargo del Tribunal Oral Federal N° 4, se investiga a Alfredo Abraham, Alberto Salvador “Negro” López, Guillermo Manfredi y Josué Fuks (prófugo de la Justicia), acusados de ingresar al país la efedrina –precursor químico para producir metanfetaminas– a través de las empresas FASA (Farmacéuticos Argentinos) y Prefarm. Este viernes 8 está previsto el alegato del fiscal Diego Luciani, aunque la agenda podría dilatarse unos días.
FASA solicitó la importación de 17.200 kilos, de los cuales se comprobó que 9.800 ingresaron al país. Prefarm solicitó 5.500 kilos, que fueron autorizados por la Sedronar, de los cuales 1.900 ingresaron por intermedio de un supuesto testaferro de estos empresarios. “FASA llegó a pedir la compra de 3 mil kilos en un día”, grafica una fuente de la causa. “Hay pruebas suficientes y testigos. Existen comunicaciones telefónicas entre Abraham y Forza (una de las víctimas del triple crimen de General Rodríguez)”, agregó la fuente.
Según pudo averiguar este diario, las defensas intentarían desligar la responsabilidad en la Sedronar. En rigor, la importación de la efedrina se produjo con la autorización del organismo, pero lo que se investiga es su posterior comercialización ilegal. Que la jueza Servini de Cubría haya procesado a José Granero, a cargo de la Sedronar, y a otros dos funcionarios, podría pesar indirectamente en este caso. La lógica es que, si los funcionarios son partícipes del delito de comercio de estupefacientes, los importadores también lo serían.
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