• No brindar información personal en llamados de desconocidos y tomar la precaución de pedir un número para devolver la llamada y chequear la veracidad del hecho.
• Tomar precaución cuando reciba un llamado proveniente de alguna unidad carcelaria y rechazarla si no tiene allí personas conocidas que pudieran querer comunicarse con usted.
• Cortar la llamada cuando desconocidos informen de accidentes sufridos por familiares. Este tipo de situaciones son comunicadas generalmente por la policía de modo personal.
• Los falsos secuestradores manifiestan ser policías, médicos o inspectores municipales, atender especialmente a este dato y solicitar las identificaciones correspondientes.
• Comunicarse rápidamente con el familiar supuestamente secuestrado.
• Mantener la calma, rápidamente alertar al 101 informando detalles del hecho al personal policial y seguir sus indicaciones.
• Para reducir las posibilidades de recibir estos llamados no llenar con datos personales cupones de procedencia desconocida.
• No agendar en los teléfonos celulares números con las palabras como: “mamá”, “papá” o “casa”, recomendando colocar directamente los nombres de las personas.
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