La zona sufrió las consecuencias de un diluvio y posterior aluvión. Hay cinco muertos y cuatro desaparecidos.
El pronóstico no lo anunciaba, pero la tragedia tenía reservada ayer una parada en Sierras Chicas. Un diluvio y posterior aluvión azotó a una gran cantidad de localidades de la zona y dejó un reguero de muerte y destrucción. Por la tarde, cuando el cielo dio un respiro, quedó un doloroso cuadro de calles inundadas, autos tapados y familias evacuadas. Y, lo que es mucho más doloroso, una cifra de cinco personas muertas y varios desaparecidos.
Todo comenzó en la noche del sábado, cuando comenzó a precipitar de manera sostenida en toda la zona y también en la cuenca alta. Para la madrugada, ya Río Ceballos, La Granja, Ascochinga, Villa Allende, Unquillo, Mendiolaza y muchas localidades más comenzaron a sentir las consecuencias.
Las calles se transformaron en ríos y los ríos, en torrentes incontrolables que arrasaron con todo a su paso. Es que entre 200 y 300 milímetros cayeron en extensos sectores de las sierras y pueblos, y toda esa agua drenó hacia el este con la fuerza de un tsunami.
La tragedia estaba en marcha. El Gobierno dispuso conformar un comité de crisis y solicitó ayuda al Ejército y Gendarmería . La cifra de evacuados trepó a 400 personas.
Desde el techo
Por los anegamientos, cientos de familias debieron subir al techo porque sus casas se inundaron. La desesperante historia se repitió en Río Ceballos, Unquillo, Villa Allende y Mendiolaza. Los arroyos y ríos desbordados llegaron a tomar las calles de las pequeñas localidades e inundar las viviendas. Debieron subir a los techos y algunos, al ceder estos, decidieron usar las medianeras.
Muchos testimonios se escucharon por las radios, principalmente de vecinos que pedían ayuda para sus familiares que se encontraban bajo la lluvia sobre las terrazas.
Las localidades más afectadas son Colonia Hogar, Ascochinga, Jesús María, Juárez Celman, Río Ceballos, Unquillo y Mendiolaza. En las Sierras Chicas, hubo evacuados y en Villa Allende y Mendiolaza, el 70 por ciento de las calles eran intransitables. Además de árboles caídos y puentes anegados.
Cuando llegó la noche, toda la región quedó sumida en la oscuridad, dado que la energía fue interrumpida.
La lluvia también obligó a la suspensión de jornada de ayer del Cosquín Rock (información en página 12).
Cortes de ruta
La Policía Caminera debió interrumpir la circulación en la ruta 9 Norte, Carlos Paz y Jesús María, por agua en la calzada, y en la ruta 9 Sur desde La Carbonada y Toledo hasta el ingreso a Río Segundo. Allí el tránsito se desviaba hacia la Autopista Córdoba-Rosario.
Desde Defensa Civil se insistió a los vecinos en no salir de sus hogares, salvo que sea extremadamente necesario, y que no se circule por las rutas.
Costanera cortada y más
El diluvio también se hizo sentir en Córdoba Capital (ver página 6), pero no tuvo la intensidad de Sierras Chicas. Por la crecida del Suquía Defensa Civil dispuso el corte preventivo de la Costanera y el acceso al vado Sargento Cabral. También hubo muchos anegamientos.
En varios sectores de la ciudad la situación era complicada, e inclusive se especuló con la desaparición de una madre con su hijita, información que no pudo se constatada hasta anoche.
Una tragedia absoluta
El gobernador José Manuel de la Sota confirmó anoche la existencia de tres víctimas fatales en Río Ceballos, a las que agregó dos personas que se divisaron sin vida en un vehículo en Colonia Hogar, cerca de Ascochinga, aunque los rescatistas no habían podido llegar a ellos.
Además, existen varias denuncias de personas desaparecidas, por lo que el número de muertos podría crecer.
Una de las víctimas confirmadas es una mujer de unos 35 años que fue arrastrada por la creciente en Río Ceballos. Su cuerpo sin vida, apareció en la calle Paraguay al 1400. Hasta anoche no había sido identificada.
Desaparecida. Entre los desaparecidos se encuentra Mariana Diarco, una joven de 21 años oriunda de Jesús María que participaba de un campamento con un grupo de scouts. Habría sido arrastrada por la creciente en la zona de La Pampa.
Fuente:DíaaDía
El pronóstico no lo anunciaba, pero la tragedia tenía reservada ayer una parada en Sierras Chicas. Un diluvio y posterior aluvión azotó a una gran cantidad de localidades de la zona y dejó un reguero de muerte y destrucción. Por la tarde, cuando el cielo dio un respiro, quedó un doloroso cuadro de calles inundadas, autos tapados y familias evacuadas. Y, lo que es mucho más doloroso, una cifra de cinco personas muertas y varios desaparecidos.
Todo comenzó en la noche del sábado, cuando comenzó a precipitar de manera sostenida en toda la zona y también en la cuenca alta. Para la madrugada, ya Río Ceballos, La Granja, Ascochinga, Villa Allende, Unquillo, Mendiolaza y muchas localidades más comenzaron a sentir las consecuencias.
Las calles se transformaron en ríos y los ríos, en torrentes incontrolables que arrasaron con todo a su paso. Es que entre 200 y 300 milímetros cayeron en extensos sectores de las sierras y pueblos, y toda esa agua drenó hacia el este con la fuerza de un tsunami.
La tragedia estaba en marcha. El Gobierno dispuso conformar un comité de crisis y solicitó ayuda al Ejército y Gendarmería . La cifra de evacuados trepó a 400 personas.
Desde el techo
Por los anegamientos, cientos de familias debieron subir al techo porque sus casas se inundaron. La desesperante historia se repitió en Río Ceballos, Unquillo, Villa Allende y Mendiolaza. Los arroyos y ríos desbordados llegaron a tomar las calles de las pequeñas localidades e inundar las viviendas. Debieron subir a los techos y algunos, al ceder estos, decidieron usar las medianeras.
Muchos testimonios se escucharon por las radios, principalmente de vecinos que pedían ayuda para sus familiares que se encontraban bajo la lluvia sobre las terrazas.
Las localidades más afectadas son Colonia Hogar, Ascochinga, Jesús María, Juárez Celman, Río Ceballos, Unquillo y Mendiolaza. En las Sierras Chicas, hubo evacuados y en Villa Allende y Mendiolaza, el 70 por ciento de las calles eran intransitables. Además de árboles caídos y puentes anegados.
Cuando llegó la noche, toda la región quedó sumida en la oscuridad, dado que la energía fue interrumpida.
La lluvia también obligó a la suspensión de jornada de ayer del Cosquín Rock (información en página 12).
Cortes de ruta
La Policía Caminera debió interrumpir la circulación en la ruta 9 Norte, Carlos Paz y Jesús María, por agua en la calzada, y en la ruta 9 Sur desde La Carbonada y Toledo hasta el ingreso a Río Segundo. Allí el tránsito se desviaba hacia la Autopista Córdoba-Rosario.
Desde Defensa Civil se insistió a los vecinos en no salir de sus hogares, salvo que sea extremadamente necesario, y que no se circule por las rutas.
Costanera cortada y más
El diluvio también se hizo sentir en Córdoba Capital (ver página 6), pero no tuvo la intensidad de Sierras Chicas. Por la crecida del Suquía Defensa Civil dispuso el corte preventivo de la Costanera y el acceso al vado Sargento Cabral. También hubo muchos anegamientos.
En varios sectores de la ciudad la situación era complicada, e inclusive se especuló con la desaparición de una madre con su hijita, información que no pudo se constatada hasta anoche.
Una tragedia absoluta
El gobernador José Manuel de la Sota confirmó anoche la existencia de tres víctimas fatales en Río Ceballos, a las que agregó dos personas que se divisaron sin vida en un vehículo en Colonia Hogar, cerca de Ascochinga, aunque los rescatistas no habían podido llegar a ellos.
Además, existen varias denuncias de personas desaparecidas, por lo que el número de muertos podría crecer.
Una de las víctimas confirmadas es una mujer de unos 35 años que fue arrastrada por la creciente en Río Ceballos. Su cuerpo sin vida, apareció en la calle Paraguay al 1400. Hasta anoche no había sido identificada.
Desaparecida. Entre los desaparecidos se encuentra Mariana Diarco, una joven de 21 años oriunda de Jesús María que participaba de un campamento con un grupo de scouts. Habría sido arrastrada por la creciente en la zona de La Pampa.
Fuente:DíaaDía
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