Punilla y Sierras Chicas, las zonas más afectadas. En Córdoba capital, algunos barrios no tienen servicio de energía y hay calles anegadas. Incontables evacuados en la provincia. El sábado hubo otro fallecido. Buscan a cuatro desaparecidos.
Las fuertes lluvias registradas el fin de semana provocaron cinco personas muertas, cuatro desaparecidas e inconvenientes en la zona de Sierras Chicas y Punilla, con arroyos y ríos desbordados. Además, el sábado se registró otra víctima fatal que murió ahogada en Cuesta Blanca.
En Córdoba capital hubo calles anegadas e interrupciones en el servicio de energía eléctrica.
Los arroyos y ríos serranos registraron crecidas en general en toda la zona serrana, en algunas cuencas con más de 300 milímetros de lluvia en las últimas horas, por lo que hay vados, caminos y rutas cortadas, informó a LaVoz Diego Concha, director de Defensa Civil provincial.
El gobernador José Manuel de la Sota pidió ayuda al Ejército para acceder a los lugares más afectados por las inundaciones. Fuentes de Casa de Gobierno confirmaron que De la Sota pidió apoyo al general Jorge Rodríguez para tareas de logística, movilidad y equipamiento para asistir a las
víctimas de la inundación.
Desde las autoridades anunciaron que una nueva y fuerte crecida podría llegar a la capital después de las 19 debido a que se abrieron aún más las válvulas del Dique San Roque.
Algunas de las localidades más afectadas, donde está complicada o interrumpida la circulación, son Ascochinga, Jesús María, Juárez Celman, Río Ceballos, Unquillo y Mendiolaza.
Desde Defensa Civil se recomienda a los vecinos no salir de sus hogares, salvo que sea extremadamente necesario, y no circular por las rutas.
En las Sierras Chicas, hubo evacuados en Villa Allende, Mendiolaza, donde el 70 por ciento de las calles están intransitables, y Río Ceballos, según informó Cadena 3.
En Cabana, a tres kilómetros de Unquillo, la creciente del arroyo se llevó una casa y un auto que estaría sin personas a bordo.
La casa se partió al medio por la corriente, pero no estaría habitada por sus moradores. Los vecinos se encuentran aislados por el agua.
El arroyo que tiene habitualmente tiene 30 centímetros de profundo y 60 centímetros de ancho pasó a tener tres metros de profundidad y 30 metros de ancho.
Fuente:LaVoz
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