Por Jorge Oviedo
El Gobierno terminó de completar su aumento de impuestos a los automóviles y decidió subir mucho la carga entre los modelos más populares que no se fabrican en el país y hasta encarecer el costo de transferencia de los usados, Hasta el último día de 2013 las unidades nacionales y las producidas en el resto del Mercosur tributaban el 1,20% del valor al inscribirlas por primera vez en el Registro Nacional.
Pero la resolución 2677/23013 del Ministerio de
Justicia publicada ayer en Boletín Oficial cambió dramáticamente las
cosas. Los automotores de fabricación nacional pagan ahora desde el
primer día del año en curso el 1,5%. El mayor cambio es para los
fabricados en el Mercosur, principalmente en Brasil. Hasta ahora, los
vehículos importados de fuera del Mercosur pagaban el 1,5% del valor de
mercado. Ahora, todos los importados, sin distinción, ya que la
resolución no la hace, pasan a pagar el 2%, Según los datos de la
asociación de concesionarios difundidos ayer, en 2013 cuatro de los diez
modelos más vendidos en la Argentina fueron fabricados fuera del país.
El VW Gol, sumado a su versión Trend, fue el modelo más patentado y representó más del 8% del mercado total de automóviles cero kilómetro en 2013.
De los doce automóviles más vendidos son importados: Gol, Ford EcoSport, Renault Duster, Renault Sandero, Ford Ka y Ford Fiesta Kinetic. Sólo esos modelos representaron el 24,43% de los patentamientos totales de automóviles. Resta considerar entre los más populares el Peugeot 208, fabricado en Brasil, que fue lanzado a mediados de 2013 y por eso tiene una participación menor en el año, pero que apuntó a colocarse en los primeros puestos. Algo parecido pasó con el Toyota Etios, que salió todavía después que el 208.
De no tratarse de un error en la redacción de la norma, la medida no sólo genera un importante aumento en la carga fiscal sobre la compra de unidades cero kilómetro. También anticipa conflictos con Brasil y con las terminales.
No parece que el gobierno de Dilma Rousseff pueda ver con agrado que se trata igual a la producción de fuera del Mercosur igual que a la de la región.
Por otro lado, las terminales también verían con desagrado ese tratamiento, ya que muchas de ellas han integrado su producción en la zona. Por ejemplo, Peugeot exporta el 408 fabricado aquí e importa el 208 fabricado en Brasil. Toyota compensa sus compras al mayor socio de la región con las ventas al exterior de la Hilux, mientras que Ford exporta la Ranger y el Focus. En general, las terminales radicaron en la Argentina la producción de unidades más costosas y traen de Brasil las menos tecnológicas y caras.
El mercado automotor sufrió un fuerte golpe con la aplicación de una fuerte alícuota de impuestos internos, que se anunció como tributo a los vehículos de alta gama, aunque alcanzó a varios de rango medio. Los empresarios del sector aclararon que esa medida encarecería muchos más modelos que los alcanzados directamente por las alícuotas del 30 y del 50% del valor sin considerar los impuestos,
Los automóviles de entre 170.000 y 210.000 pesos de precio sin considerar los impuestos pagan ahora un impuesto al lujo del 30%; mientras los que superan los 210.000 pagan el 50 por ciento.
Por la forma en que se calcula el tributo, las subas de los precios pueden llegar hasta el 80% del valor que tenían al público. Automóviles que se vendían a 300.000 pesos pasarían a costar unos 500.000, calculan las terminales. A eso se sumaría el aumento del costo del patentamiento y también, por ejemplo, el aumento de la alícuota de sellos en la ciudad de Buenos Aires.
También se encarecen las transferencias de usados, que pagarán el 1,5% si son nacionales y el 2% si son importados. Y otra vez desaparece la distinción a favor de los del Mercosur. De modo tal que el impuestazo alcanza también a la transferencia de un Gol, que por años ha sido el vehículo más vendido en el país.
El valor de inscripción inicial nunca podrá ser inferior a los 1500 pesos para los automóviles cero kilómetro nacionales ni de menos de 2000 para los importados.
Fuente: La Nación 4.01.13
El Gobierno terminó de completar su aumento de impuestos a los automóviles y decidió subir mucho la carga entre los modelos más populares que no se fabrican en el país y hasta encarecer el costo de transferencia de los usados, Hasta el último día de 2013 las unidades nacionales y las producidas en el resto del Mercosur tributaban el 1,20% del valor al inscribirlas por primera vez en el Registro Nacional.
El VW Gol, sumado a su versión Trend, fue el modelo más patentado y representó más del 8% del mercado total de automóviles cero kilómetro en 2013.
De los doce automóviles más vendidos son importados: Gol, Ford EcoSport, Renault Duster, Renault Sandero, Ford Ka y Ford Fiesta Kinetic. Sólo esos modelos representaron el 24,43% de los patentamientos totales de automóviles. Resta considerar entre los más populares el Peugeot 208, fabricado en Brasil, que fue lanzado a mediados de 2013 y por eso tiene una participación menor en el año, pero que apuntó a colocarse en los primeros puestos. Algo parecido pasó con el Toyota Etios, que salió todavía después que el 208.
De no tratarse de un error en la redacción de la norma, la medida no sólo genera un importante aumento en la carga fiscal sobre la compra de unidades cero kilómetro. También anticipa conflictos con Brasil y con las terminales.
No parece que el gobierno de Dilma Rousseff pueda ver con agrado que se trata igual a la producción de fuera del Mercosur igual que a la de la región.
Por otro lado, las terminales también verían con desagrado ese tratamiento, ya que muchas de ellas han integrado su producción en la zona. Por ejemplo, Peugeot exporta el 408 fabricado aquí e importa el 208 fabricado en Brasil. Toyota compensa sus compras al mayor socio de la región con las ventas al exterior de la Hilux, mientras que Ford exporta la Ranger y el Focus. En general, las terminales radicaron en la Argentina la producción de unidades más costosas y traen de Brasil las menos tecnológicas y caras.
El mercado automotor sufrió un fuerte golpe con la aplicación de una fuerte alícuota de impuestos internos, que se anunció como tributo a los vehículos de alta gama, aunque alcanzó a varios de rango medio. Los empresarios del sector aclararon que esa medida encarecería muchos más modelos que los alcanzados directamente por las alícuotas del 30 y del 50% del valor sin considerar los impuestos,
Los automóviles de entre 170.000 y 210.000 pesos de precio sin considerar los impuestos pagan ahora un impuesto al lujo del 30%; mientras los que superan los 210.000 pagan el 50 por ciento.
Por la forma en que se calcula el tributo, las subas de los precios pueden llegar hasta el 80% del valor que tenían al público. Automóviles que se vendían a 300.000 pesos pasarían a costar unos 500.000, calculan las terminales. A eso se sumaría el aumento del costo del patentamiento y también, por ejemplo, el aumento de la alícuota de sellos en la ciudad de Buenos Aires.
También se encarecen las transferencias de usados, que pagarán el 1,5% si son nacionales y el 2% si son importados. Y otra vez desaparece la distinción a favor de los del Mercosur. De modo tal que el impuestazo alcanza también a la transferencia de un Gol, que por años ha sido el vehículo más vendido en el país.
El valor de inscripción inicial nunca podrá ser inferior a los 1500 pesos para los automóviles cero kilómetro nacionales ni de menos de 2000 para los importados.
Fuente: La Nación 4.01.13
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