El artículo que publicamos a continuación fue escrito por el gran comunicador científico español Eduard Punset. A pesar de estar escrito en base a acontecimientos que ocurren en su país, nos trae a la mente mucho de lo que estamos viviendo y padeciendo de forma muy similar en nuestra Argentina.
Esperamos sea de su agrado...
CIIUDADANOS AUTOCONVOCADOS DE RÍO CUARTO
Eduard Punset |
Autor: Eduard Punset - 24
noviembre 2013
La
Justicia está poniendo al descubierto a delincuentes que han vivido durante
años de fondos públicos desviados para fines no previstos. Representantes de instituciones creadas
para defender intereses específicos de gente ubicada en el sector más mísero de
la escala social están siendo investigados, descubiertos y acusados de
delinquir.
Entretanto, el Gobierno lleva semanas revelando la aparición
de brotes verdes que la gente de la calle ni ve ni siente. La tasa de paro sigue(desempleo), en el mejor de los casos, estancada.
No hay indicios de que hayan tocado fondo los precios del sector inmobiliario. Y tampoco es cierto que haya disminuido la
deuda del país.
Entonces, ¿por qué los
políticos predican un sermón que nadie cree? Hay razones para ello. En
primer lugar, no estamos acostumbrados a que después de ocho años de economía
estancada y deprimida se siga sin ver la salida. Tras la Segunda Guerra
Mundial, no es frecuente que los ciclos económicos tarden tanto tiempo en
desplegarse.
En segundo lugar, la supuesta expansión de los países
emergentes –a los que dedicó cierta atención el presidente del Gobierno en su
gira por América Latina hace poco– no es todo lo firme que se esperaba. Los
núcleos de expansión, no necesariamente países, podría decirse que están en otra
parte.
Al final, tal vez tengan razón los que advirtieron hace
tiempo de que lo importante en el futuro no será tanto el ritmo de crecimiento
como el conocimiento acumulado y disponible. Es decir, la tecnología.
Aunque fue un gran salto de la humanidad, pisar la Luna fue posible gracias al conocimiento acumulado (Imagen: NASA / Buzz Aldrin). |
Hace algunas décadas, los científicos recordaron que la
tecnología no es una ciencia divina que, de pronto, ayuda a dar saltos
gigantescos, sino que es una combinación de tecnologías ya existentes que
podemos visualizar en centros educativos, revistas, conferencias y reuniones
inesperadas. España apenas está
empezando este largo recorrido. Un marciano que aterrizara de pronto en España
seguro que recomendaría a sus amigos españoles gastar menos en agricultura y
turismo y más en ciencia y tecnología. ¿Qué otras cosas aconsejaría un sabio
marciano a sus amigos emprendedores españoles? Hablar menos y saber escuchar con la sonrisa en la boca. Es
absolutamente indispensable conciliar entretenimiento y conocimiento. La
experiencia de miles de profesores en miles de centros de enseñanza nos ha
mostrado que es preciso distraer a la gente para que aprenda; si no se la
distrae, no aprende. De cara al futuro también resultará vital conocer las
normas esenciales para trabajar en equipo. En España no solo se desconocen las reglas básicas del
trabajo en equipo, sino que la envidia heredada tiende a mortificar a quien se
le ocurra realizarlo. Por último, yo no me canso de repetir a los alumnos
que aprovechen el tiempo para aprender una segunda disciplina, que puede no
estar relacionada para nada con la que fue su vocación primera. Si han
terminado Biología, ¿por qué no intentar ahora aprender la tecnología de los
computadores? En la vida laboral les van a pedir, con toda seguridad, que sepan
algo de las dos carreras. Tan importante como el dominio de la vida multicelular
es saber trabajar en equipo, conocer distintos idiomas, haber congeniado con
caracteres distintos y mentalidades diferentes. Cambiar de universo, si eso es posible. Profundizar en las nuevas
técnicas de comunicación digital todo el mundo lo da por descontado, sin que se
dé en la realidad. Hacer gala de menos
contenidos académicos y más de otros que estén en sintonía con el corazón de la
sociedad global.
Fuente:http://www.eduardpunset.es
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