La sociedad actúa en determinadas circunstancias como un organismo idéntico al humano, y también elabora defensas, generando sus propios anticuerpos.
Lo que pasó con el impuestazo es bastante ilustrativo. Analicemos: Desde el municipio se elaboró un aumento impositivo urbano que fue y es resistido por la población, desencadenó como respuesta social un reclamo que aún hoy persiste y la situación en lugar de mejorarse se agrava, porque luego de tanto alboroto… se recauda menos y hay que recurrir al apriete para que los vecinos se callen. Pero este alboroto persistente de los ciudadanos actuó como un factor desencadenante y hoy, cuando las cuentas municipales siguen preocupando, el intendente Jure desestima que haya un nuevo aumento de tasas y definió no subir los impuestos en el 2010, ni aún el 20 % que quedó pendiente del impuestazo por el fuerte rechazo social que provocó.
Según una alta fuente del gobierno, y sería interesante saber quien, de acuerdo a Puntal, expresó: “No habrá aumento de tasa. Es una decisión tomada y tajante. En cambio vamos a entrar en la segunda etapa del ajuste de gastos que iniciamos este año. Habrá cambios operativos en el gobierno y una reorganización de áreas para hacer más eficiente el gasto”.
La racionalización administrativa es un reclamo reiterado de la población que puede apreciar en una ciudad como Río Cuarto, los desfasajes que se producen por la mala administración de recursos, y es muy irritante cuando surgen temas pendientes de esclarecimiento tal lo que sucede con Gamsur, la Fundación Ergón, el ingreso de personal como lo denuncia ATE, etc.
Lo venimos señalando desde enero, el impuestazo responde a muchas causas, la gente está aún reclamando por su derogación, si en vez de eso se decide aumentar las tasas no dudemos que va a ser como echar nafta al fuego.
La actitud del intendente Jure, de evitar que esto suceda muestra entonces el “efecto vacuna”, o sea que lo que se logró con el reclamo popular es que desde el gobierno municipal respeten al ciudadano y no piensen en el bolsillo del contribuyente como el sitio más próximo para sanear las finanzas.
¿Ud. no cree que con la actitud de la sociedad de Río Cuarto, “vacunó” a sus gobernantes y les hizo entender cuál es el camino equivocado para “curarse”?
La persistencia de los vecinos en las calles, no sólo debe lograr lo antedicho, que no es poco, sino que debe conseguir que el aumento de hasta el 600% en el inmobiliario urbano sea derogado. Entonces sí que podremos decir que el éxito de la “vacuna” fue total
CIUDADANOS AUTOCONVOCADOS DE RIO CUARTO
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