Ha muerto Ernesto
Sábato, y lo podemos evocar por muchos hechos. Fue el científico que dejó su
carrera para convertirse en escritor, el autor de obras célebres, el literato galardonado
con el premio Cervantes, el amigo de Borges, el cuestionado partícipe en un almuerzo
con Videla, el vecino de vida simple, el dolido padre que perdió a su hijo Jorge, pero por sobre todas las cosas fue el presidente de la Comisión Nacional
sobre Desaparición de Personas (CONADEP). Esa Comisión y su informe vertidos en
el libro Nunca Más fueron trascendentes para llevar adelante el histórico Juicio
a las Juntas Militares.
Así Sábato adquirió otra dimensión entre el pueblo de la nación,
cómo artífice fundamentalmente comprometido con la democracia recuperada. A pesar de todas las críticas que aún hoy subsisten,
lo recordaremos desde el pueblo por que nos dejó con la laboriosidad de la
CONADEP un legado que le agradeceremos por siempre, para que efectivamente se
haga realidad en el porvenir que NUNCA MAS suframos los horrores del terrorismo
de Estado que el gobierno de facto nos
hizo padecer, y que quedó plasmado en un libro cuya lectura es estremecedora y
necesaria.
CIUDADANOS AUTOCONVOCADOS DE RIO CUARTO
CIUDADANOS AUTOCONVOCADOS DE RIO CUARTO
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