El dengue comparte carteleras con la gripe porcina, ahora Influenza A, que tiene por sobre nuestra local epidemia la particularidad de afectar no sólo a los países en desarrollo sino también preocupar al primer mundo. Así el tema dengue fue perdiendo lugar en el temario de noticias. Quizá ese fue el momento esperado para que se produjera el reemplazo de la Ministra de Salud del Chaco, Sandra Mendoza, esposa del gobernador Jorge Capitanich.
Duramente cuestionada por las dimensiones que alcanzó la situación generada por la enfermedad que pretendieron desde su ministerio ocultar con estadísticas dibujadas, Mendoza debió finalmente renunciar, dado que la crisis desencadenada expuso la más cruel realidad de esa provincia. Esa realidad que tiene que ver con las condiciones miserables de vida de tanto chaqueños, en donde los vectores que transmiten las infecciones encuentran sus mejores caldos de cultivo, por más que el ex-presidente Kirchner trate de desvincular la relación entre infección y pobreza.
Su reemplazante, José Baquero, reinicia las promesas de todos los que alcanzan cargos similares, buenas intenciones dificiles de alcanzar sin planes globales de atención y con recursos que se manejan desde el poder central no siempre de acuerdo a las necesidades de la población y menos aún la del interior.
También sería interesante que en este país nuestro alguna vez, estos funcionarios que con su hacer o no hacer conducen erroneamente situaciones tan complejas como las que transita la provincia norteña que dejan secuelas de muertos y enfermos, tuvieran que responder ante la Justicia de su accionar para que se cumpla aquello de "que Dios y la Patria lo demanden".
El nepotismo nunca fue un buen camino, este es otro doloroso ejemplo.
Para que veamos si el ciclo se repite, le acercamos lo que leemos en el diario Norte, anunciando la asunción del nuevo Ministro chaqueño:
El gobernador Jorge Capitanich aceptó la renuncia de Sandra Mendoza al cargo de ministra de Salud, por lo que este viernes tomó juramento al nuevo titular de la cartera sanitaria, José Francisco Baquero. Además, Néstor Avalle asumió como subsecretario de Políticas Comunicacionales.
El cambio en la cartera sanitaria se debe a que Sandra Mendoza presentó su renuncia para dejar abierta la posibilidad de que comience una nueva etapa en la aplicación de políticas públicas sanitarias. Baquero juró por su esposa, sus hijos y sus nietos. La asunción de Avalle, según el decreto 844/09, responde a la creación de la Subsecretaria de Política Comunicacional, dependiente de la Secretaria General de la Gobernación, para el manejo de las pautas publicitarias del Ejecutivo y de la comunicación gubernamental.
EL MISMO COMPROMISO: UN SISTEMA EFICIENTE El nuevo ministro de Salud explicó que se realizó una transición ordenada con la intención de seguir trabajando con lineamientos precisos sobre el Plan Estratégico de Salud, “para profundizar el accesos de la población a la salud” y explicó que su intención es trabajar cerca de los ciudadanos. Además, Baquero destacó que luchará contra el dengue y para que la gripe A no afecte a los chaqueños. Además fortalecerá los servicios de salud para estar más cerca de quienes necesitan. “Asumo el compromiso con el trabajo y la honestidad”, dijo y comentó que estará al lado del pueblo, con la convicción de llevar a cabo lo encomendado por el gobernador, “que aquellos que los necesitan tengan un servicio eficaz y eficiente, financiamiento genuino, luchando para que la calidad de los servicios prestados sean los mejores”. Y confirmó que el modelo de gestión será ligado al paciente, y poner el empeño en lograr que aquello que no funciona o quienes, por algún motivo, no trabajan adecuadamente esté comprometido con la salud, y que el servicio sanitario sea “accesible, rápida y eficiente, con organización, financiamiento y calidad de servicio”.
CIUDADANOS AUTOCONVOCADOS DE RIO CUARTO
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Los comentarios publicados son de responsabilidad exclusiva de quien los envíe. No siempre refleja nuestra opinión.