El diario local nos depara una sorpresa que es la imagen de un grupo de concejales en un relevamiento que realizan vinculado con la construcción.
Sorpresa, porque no es común que los concejales salgan a la calle a preguntarle a la población por sus problemas. Como dice el refrán...más vale tarde que nunca, y en esto los concejales se anotan porque si hay un tema que viene pregonándose como conflictivo es el del boom edilicio en la ciudad que dejó al descubierto la falta de planificación urbana de Río Cuarto, con serias consecuencias para los vecinos.
El tema es totalmente conocido porque los propios damnificados se han preocupado por difundirlo, sin encontrar respuestas a sus múltiples demandas. Sus lamentos y situaciones de injusticia se dieron y se siguen dando. En una ciudad chica como la nuestra los ejemplos abundan con respecto a las viviendas dañadas por los edificios que fueron con el tiempo ganado proporciones y sembrando problemas en forma directamente proporcional.
Pero ahora se debe debatir el nuevo Código de Planeamiento, y cada sector toma posiciones, siendo el tema más polémico el de considerar los retiros laterales que habría que dejar entre los edificios y las viviendas colindantes. Así mientras el gremio de la construcción (UOCRA) amenaza con endurecer su posición frente a esta medida que considera que puede limitar la oferta laboral si mermara la construcción de torres, los concejales salen a preguntar a los vecinos su opinión.
Y ya esta opinión fue expuesta tantas veces que sólo puede significar un aporte desde el punto de vista estadístico, porque la respuesta es harto conocida desde el momento que al que padece una obra al lado de su casa, le destruyen algo más que la vivienda, quién puede no querer estos retiros.
Pero, quizá lo más interesante sería que se diagramara un esquema de ciudad, que no nos amontone a los pobladores en un área limitada del micro y macrocentro porque el sentido común y las evidencias ya nos demuestran los problemas generados por la sobrepoblación en el área. Vivimos en el medio de una interesante y extensa llanura, quizá deberíamos aprender a aprovechar un poco más el espacio, sería un interesante tópico a tener en cuenta en el nuevo Código, a pesar que las reglas del mercado señalen que debemos amontonarnos en una determinada área.
Prevenir accidentes de tránsito, respetar espacios verdes, aliviar la demanda de servicios básicos, entre otros temas descongestionando el macrocentro sería una medida interesante para la ciudad futura, que aspira a algo más que sumar edificios de calidad de construcción cuestionable por no decir precaria en muchos casos como se ha dado en vastos sectores de nuestra ciudad, que no precisamente solucionan el problema de déficit de vivendas que padecemos.
Los vecinos somos los últimos consultados, y también como en muchas otras cuestiones los primeros damnificados. Perdimos viviendas, tranquilidad y corremos riesgos cuando una obra en construcción se instala al lado de nuestra casa, como un castigo infernal, ante el cual mansamente hay que resignarse, de acuerdo a este estado de cosas desde la administración municipal.
Las planificaciones deben contemplar no sólo los intereses corporativos, que son los más en esta puja, por eso que los concejales estén en la calle relevando datos es interesante. Lo debieron haber hecho mucho tiempo atrás y no sólo por este tema. Así habrían podido advertir el humor de la gente ante diferentes problemas como lo fue por ejemplo el error del impuestazo públicamente admitido por el intendente Jure. Y también podrán si pueden y quieren preguntar, advertir qué opina la gente con respecto al retroactivo de 10.000 pesos que les corresponde cobrar en tres cuotas, por no haberse adherido a la extensión de la emergencia que en abril del año pasado dispuso el intendente Jure. Así planteadas las cosas, próximamente recibirán el 30% que les había sido descontado.
El mencionado retroactivo fue rechazado por Eduardo Yuni, Viviana Pomiglio , Jorge Cendoya y Eduardo Scoppa. Ninguno más de acuerdo a la información que trascendió por los medios, entonces los concejales que aparecen en la foto de Puntal que se anotan para pasar por caja para cobrar la diferencia señalada, pueden interrogar a los vecinos. Quizás la respuesta sea tan abrumadora como la demanda de que se respeten los retiros laterales en la construcción.
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