¿Cómo financiar la conversión de la Ruta 36 en autovía?

La ruta 36 colapsada es el tema recurrente de cuanto viajero debe transitarla. Motivo permanente de desvelo para los pobladores del sur cordobés especialmente, que la recorren en su traslado a la capital provincial, el estado de la 36 ha movilizado a representantes e instituciones de la comunidad de Río Cuarto que organizados en una Multisectorial tratan de aunar esfuerzo para revertir la situación de esta importante vía de comunicación. Llegaron hasta el actual gobernador José Manuel  De la Sota, y nos enteramos por lo publicado en la edición del domingo 15 de enero del diario capitalino La Voz del Interior las posibilidades que se barajan en cuanto a conseguir los fondos para realizar una autovía que satisfaga la demanda de los usuarios.

El actual momento económico de la provincia, no es de lo más brillante precisamente, las demandas de aumento salariales del sector público, no se atienden por esta época y el caso emblemático es el de los hospitales en paro  con atención mínima, los municipios cuentan chirolas para pagar salarios, y la sequía amenaza convertirse en un cuello de botella difícil de superar para las arcas oficiales.Para los oídos de los simples ciudadanos lograr el ansiado camino parece una utopía  por que a la luz de  un razonamiento práctico pretender desde la provincia hacerse cargo de la obra de la autovía Río Cuarto- Córdoba, es un desafío al ingenio. Claro, a lo mejor se soluciona con un nuevo “toquecito” al bolsillo de los cordobeses, de acuerdo al artículo del diario mencionado. Cómo es un tema de interés prioritario para nuestra ciudad y región lo invitamos a leerlo.

CIUDADANOS AUTOCONVOCADOS DE RIO CUARTO
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Impuesto al combustible para la autovía

Cobrar 20 centavos por litro de nafta es una de las alternativas que se analiza para construir la artería que unirá Córdoba con Río Cuarto. La obra es prioritaria para De la Sota.

El gobernador José Manuel de la Sota tiene una idea fija: construir la autovía Córdoba-Río Cuarto. Para esta obra de infraestructura, en el Gobierno provincial se analizan distintas alternativa. Una, es cobrar un impuesto de 20 centavos por litro de nafta para financiar con recursos propios esta obra que demandará alrededor de 1.600 millones de pesos.
De la Sota remarcó en varias oportunidades que la actual ruta nacional 36 “no tiene arreglo” y que la única salida es construir una autovía.
Días pasados, cuando se reunió con la multisectorial de Río Cuarto, anticipó que estaba analizando la posibilidad de cobrar un adicional a las naftas (serían 20 centavos por litro) y crear un fondo específico para construir la autovía.
Esta sería la última alternativa, si fracasan los intentos por buscar financiamiento externo, según indicaron ayer funcionarios provinciales.
Esta idea también será explicada en los próximos días por De la Sota al Entre Promotor, que reúne a intendentes, empresarios y vecinos de las distintas localidades a la vera de la cuestionada vía de comunicación.

La primera gestión de la Provincia será solicitarle al Gobierno nacional que le traspase la administración de la ruta 36 para poder iniciar tratativas para construir por su cuenta la autovía.

Hubo contactos informales con Raúl Daruich, jefe de distrito de Vialidad Nacional en Córdoba, quien admitió a este diario que esta posibilidad “es factible”. Esto teniendo en cuenta que en un contexto de recursos acotados es poco probable que la Nación destine los fondos que están presupuestados para esta obra.
Antes de asumir, De la Sota realizó una gira por Estados Unidos, donde se reunió con directivos del Banco Mundial y el Banco Interamericano de Desarrollo (BID). Allí comprobó que la salida más viable es que estos organismos financien el proyecto, pero a empresas privadas, con garantía de la Provincia.
Los organismos internacionales hoy se inclinan por negociar con empresas, más que con los estados.

De la Sota también tomó contacto con dos de las principales constructoras brasileñas, Odebrecht y Camargo Correa. . Estas empresas podrían hacer la obra con fondos del Banco Nacional de Desarrollo Económico y Social (Bndes) de Brasil que les otorga créditos sólo a empresas de su país.
Es lo que hizo con la constructora brasileña Andrade Gutiérrez, que realizará los gasoductos en el interior de la provincia.

Plan “Laurita”

Si el contexto de crisis internacional impide la posibilidad del financiamiento externo, De la Sota y su equipo barajan otra alternativa: un impuesto a las naftas en todo el territorio provincial para poder financiar esta obra. Esta iniciativa sería parecida al Plan Laura que en su momento se impulsó para construir autopista en todo el país, cobrando un impuesto a los combustibles.

Según admiten funcionarios delasotistas, cobrando 20 centavos por litro de nafta, se podría recaudar al año casi mil millones de pesos. Con dinero en la mano, se podría bajar de manera considerable el costo de la construcción.

Hoy, las estimaciones de la Provincia indican que la construcción de la autovía podría costar entre cinco y seis millones de pesos el kilómetro.
Aunque al gobernador le llegó un dato de San Luis que lo sorprendió: los Rodríguez Saá construyeron varias autopistas con un costo de tres millones de pesos el kilómetro.
No es casual que el nuevo gobernador de San Luis, el cordobés Claudio Poggi, sea amigo personal de Adriana Nazario, pareja de De la Sota.

La Voz del Interior 15.1.12