Te cuento

Audio al final

Por Elsa Abate

Así, nadie se levantará mañana. Los noticieros dan cuenta que si sales a la calle pueden ocurrirte las más terribles cosas. Que cuáles serían esas terribles cosas? Morirte y no de muerte natural o sí, depende. Depende de: puedes ser asesinada, o morir del disgusto porque te robaron la alianza con lo cual quedarías expuesta a que a la vuelta de la esquina esté esperándote un violador que al ver que no tenés alianza, (detalle en el que se fijan muy bien porque forma parte de la patología) se siente más incentivado y ya no te viola solamente sino que luego de satisfacer sus furias internas ·te mata· de la manera más brutal, como es, en vez de darte respiración boca a boca te llena los pulmones de aire para que no grites y ahí fuiste….fuiste víctima. Si te quedas en tu casa, pese al calor, no abras ventanas ni puertas ni banderolas ni balancines del baño aunque recién lo hayas usado después de tomar un laxante o un Vidacol o un yogurt con fibras; no, no abras porque los chorros pueden atormentarte con palabras del otro lado hasta vencer tus defensas y vos ya exangüe les abres la puerta solita, calladita y ellos entran y sin premura te roban todo y salen campantes y saludan al portero, a tu vecino que encima piensan que recibiste visitas o bien que te mudas y la muy desconsiderada no te despediste. Pero si sos valiente y decides salir, por favor no te pongas en la cintura la plata porque ya lo dijeron en los noticieros y los chorros están enterados, entonces lo primero que hacen es desnudarte dejando tus hijares o huesos expuestos a los ojos curiosos de los transeúntes que piensan: mirá los tiempos que vivimos ya ni se visten las mujeres, esas locas no tienen límites, se creen que la calle es un corsódromo. No, mejor no lleves nada de dinero o mejor llevá billetes falsos y a los billetes verdaderos los envolvés en el plástico con el que cubrís la verdura en la heladera que no me acuerdo cómo se llama y te lo colocás debajo del paladar de la dentadura. Tiene que ser un solo billete porque más no podrás. Si tenés que pagar te das vuelta hacia la estantería que tenés a tu espalda como que mirás algún producto allí expuesto y disimuladamente sin que se de cuenta la persona de la caja, sacás el billete de abajo del paladar de la dentadura postiza y le pagás, previo haberle sacado el nylon. Pero esto no se lo comentes a nadie porque si no los chorros se enteran. Esto tiene el beneficio que dejás en muchos casos de gastar en Corega porque luego de sacarte el nylon del paladar la dentadura te queda bien pegada. Esto lo hacés si tenés que ir a pagar algo como por ejemplo un litro de leche porque con cien pesos no podrás pagar ninguna boleta de ningún servicio, comprar quizá un kilo de papas, no más. Para pagar las facturas de los servicios, mejor llamás a una empresa de esas dedicadas a este trabajo ahora insalubre por los contagios a los que te expone. Ellos son los que cuando vas al banco se estacionan dos horas en el cajero hasta que pagan todas las boletas, mientras vos esperás para cobrar esa suculenta jubilación y te preguntás por qué nunca ves en la cola a ningún político, gremialista, concejal o sea a ninguno de esos hombres generosos que nos representaron durante tanto tiempo y terminás dándote cuenta que ellos por los sacrificios que vos no estabas dispuesta a realizar por este pueblo bien pensado y sobre todo más que trabajador, obsesivo por el trabajo con la lengua, aquellos hombres generosos solidarios sabios responsables y honestos tienen el beneficio de tener una cuenta abierta en el banco a su nombre adonde le transfieren sus jubilaciones. Vos no podés abrir una cuenta porque el monto de tu jubilación no te lo permitiría, te darás cuenta una vez que  te asesorás del costo de mantenimiento de esa cuenta. Además vos cobrás en pesos y los diputados, senadores y gremialistas cobran en dólares, por si no lo sabés. Te decía que mientras estás en la cola y el de la empresa de pagos de servicios está adherido a la ventanilla pagando todas las boletas que le confiaron, no estés siempre de frente. De a ratos tenés que darte vuelta y ponerte de espaldas como cuando éramos chicas y debíamos dar vuelta el espaldar del banco del tranvía porque tomaba otra vía, no me acuerdo pero sí me acuerdo que a mí me mareaba mucho eso. Te das vuelta y lo mirás de frente al que tenés atrás mientras mirás quién entra y sale, quien se acerca, entra, pasa, si podés, por la vereda, y a la persona que tenías adelante le preguntás si en tu espalda está todo bien, si no tenés una mancha (asegurate antes de salir que la chomba esté limpia) una marca, una peluza, algo que pueda servir para que cuando salgas te identifiquen y te roben la jubilación a la que estás esperando para ver si tenés algún aumento por haber soñado con ello pero que cuando llegués al cajero del banco y te cuente los billetitos planchaditos te darás cuenta que el sueño terminó y encima te descontaron porque todos debemos favorecer la mejor distribución de la riqueza. Vos sabés que si de riqueza hablamos la caja de los jubilados es la más abultada en este país, de modo que no digas nada, te das vuelta y salís como algunos católicos se dan vuelta y salen después de haber recibido la comunión, con recogimiento y sumisión, caso contrario te pueden ver los chorros y te esperan a la salida, en la esquina, en la parada del colectivo y ahí fuiste…fuiste saqueada, nuevamente. Tampoco te quedes muy tranquila en tu casa, aún cuando hayas cerrado todo como te dije al comienzo; mejor fijate en las casas  y/o edificios que te rodean. Fijate por ejemplo si algún vecino está haciendo alguna refacción en su casa. En ese caso, estás perdida. Totalmente perdida. Corrés el riesgo que hagan un boquete en la pared, te roben la jubilación y la alianza, te violen y te maten. No, no me digas que tenés auto y que eso te da cierta seguridad, no, porque cuando pares en un semáforo detrás de un casco de motociclista se esconde un chorro que te rompe el vidrio y si tenés suerte te roba la cartera y si no, se mete en el auto porque son re-flacos y te roban el auto pero vos estás arriba y te tendrás que bancar lo que venga y lo que venga pueden ser muchas cosas que no te enumero para no asustarte.

¿Sabés que Dianita después del sacrificio que hicieron con Horacio para comprarse la casa en el Country por seguridad fueron robados y decidieron irse con unos tíos a España??? Nos juntamos en una pizzería para despedirnos pero tuvimos mala suerte. A Horacio lo apuntaron de atrás, él abrió grandes los ojos, yo lo miraba ebria y no por la cerveza sino por el miedo, lo ví meter la mano en el bolsillo interno del saco y llevar todo lo que sacó hacia el hombro izquierdo mientras un  chorro que lo apuntaba en la nuca y estaba encapuchado, miraba para otro lado. Una vez que Horacio puso todo lo que sacó del bolsillo interno del saco sobre su hombro izquierdo el tipo desapareció. Sí, desapareció porque ninguno pudo decir confirmar a ciencia cierta hacia dónde fue. Como te decía nos estábamos despidiendo. Horacio, pobre, se echó sobre la mesa y gemía mientras Dianita lo consolaba y le decía: ya nos vamos amor,

te robaron pesos argentinos, las tarjetas de crédito de acá, allá todo será distinto, los españoles ahora están en el primer mundo, en la ONU y qué se yo cuanta cosa más le decía pero el pobre de Horacio seguía gimiendo. Nos levantamos sin brindar por el futuro de Dianita y Horacio, por sus éxitos en el país del primer mundo, por la suerte de dejar éste del tercer mundo, todos serios, nerviosos, pagamos rápido y cada uno buscó cómo salir lo más rápido posible del lugar para llegar lo más pronto a la tranquilidad del hogar ¡imaginate! Te cuento que llegué a casa y lo primero que hice fue ir al baño; es lógico y natural te darás cuenta, después de esa experiencia y te comento que mientras mi cuerpo se entregaba a sus funciones vitales recordé que no había saludado a Dianita y Horacio.

Hoy recibí para mi asombro, un llamado de Dianita. No lo podía creer y como buena argentina grité ¡¡¡Dianitaaaaaaaaaaaaaaaaaa queridaaaaaaaaaa cómo estássssssss cómo te sentís en un país seguro del primer mundooooooooooo!!!!!!!!!...

Del otro lado del teléfono una voz ronca me contestó: ¡Calláte estúpida que estoy de vuelta en Argentina!!!... Noooooo, contesté. Decime decime decime qué pasó, por qué no viajaste, no me digás que Horacio se infartó por lo ocurrido en la pizzería!!!! …No, no, contestó Dianita, nos deportaron!!!!....Qué….qué decís Dianita, aclarame por favor!!!!... Y..ocurrió que el estúpido de Horacio se olvidó de llevar el Certificado de la Vacuna contra la Gripe A y nos llevaron arrastrando el equipaje que no queríamos perder, a los empujones y más te digo, nos echaron a un avión como bultos….No, no no no, me niego a creer lo que me decís porque la vacuna se la podían poner en el aeropuerto y los españoles adoran a los argentinos, vos sabés lo del pan blanco que les mandamos, el oro, la plata, las empresas que les regalamos a ellos, a la madre patria, el bicentenario….El cariño en este país por los gallegos que los tenemos hasta en los canales de TV y en radio como periodistas ahora…..Sí, pero ellos, los españoles, gallegos o como quieras llamarlos, son olvidadizos y no recuerdan nada además de librar una batalla campal contra todos los extranjeros, especialmente latinoamericanos…Ummmm Dianita me cuesta me cuesta creerte ¿y los Derechos Humanos? ….Ellos lo aplican muy bien, como verás, empiezan por casa. Esto le ocurrió a Dianita y Horacio y te juro que es verdadddd .

Mirá, no es que quiera asustarte, no, pero cuidate por favor. Sabemos que los índices en este país no funcionan de modo que nunca sabremos cuántos argentinos han muerto en estos tiempos por inseguridad como también sabés que la inseguridad es sólo una sensación nunca una realidad, que los noticieros inventan las noticias y las salas velatorias están de adorno pero qué se yo….mejor no salgas, no ventiles tu casa, no hagas nuevos amigos, no viajes al primer mundo, disfrutá el yoga por TV, escuchá a Boreinboim por Films&Arts, aprendé Historia por el canal Encuentro, viajá por Argentina con el Chango Spasziuk que es un divino pero cuidate. Ya va a pasar, porque convengamos que todo pasa ¿no? Y si no fijate cómo aprendemos a ubicarnos ahora los argentinos en esta realidad virtual de los noticieros.

Te cuento (también puede oír la narración en este audio)