Bariloche, esa región magnífica de nuestro país, se vio convulsionada por saqueos,
los hechos se dieron en el Alto donde viven más de 30 mil personas, la mayoría
en situación de pobreza. Situaciones similares y preocupantes
se registraron en Rosario Campana. Es un
fuerte cimbrón para el país que transita su vida democrática y recuerda por
estos días la caída del gobierno de la Alianza, que se den semejantes hechos. ¿Hay
un trasfondo social con gran malestar que aparece con violencia a pesar del
discurso exitista del gobierno nacional? ¿ No está todo tan bien cómo se dice o
simplemente estos hechos responden a determinados móviles políticos que se
tildan de desestabilizantes? Nosotros los ciudadanos comunes observamos con
preocupación lo que pasa y tratamos de
sacar conclusiones sobre los sucesos, más aún cuando se han dado lejos de nuestra
región con características y variables propias que ignoramos. Para eso lo
invitamos a leer una nota que analiza la situación previa que desembocaría en
el conflicto que se vive en el sur del país, Ud, sacará sus conclusiones y dirá si Clarín miente.
Una zona castigada por la caída de planes, la droga y el desempleo
Por Claudio Andrade
El 12 de
octubre, unos 100 integrantes del Movimiento Indigenista 1° de Mayo intentó
tirar abajo la estatua dedicada al General Roca ubicada en el Centro Cívico de
Bariloche. La policía logró controlar la situación pero los del movimiento
exigieron entrevistarse con el intendente Omar Goye y le manifestaron su
preocupación porque se estaban “cayendo” los planes sociales. Se referían a los
planes laborales por tareas menores que le dejan a cada familia del Alto de
Bariloche unos 1.000 pesos. Goye tomó nota, pero no hizo lo suficiente. La
extrema tensión en los barrios periféricos fue denunciada por la Iglesia local,
distintos actores sociales y por la Agrupación Padres del Alto Contra las
Drogas.
El Barrio
Alto está conformado por más de 30 mil personas, la gran mayoría en situación
de pobreza. Viven en casas precarias y padecen un desempleo crónico que fue
acentuado el año pasado con la llegada de las cenizas del volcán Puyehue .
La crisis de las cenizas aun no fue superada. Por un lado, el último año se
registraron notorias caídas en las reservas hoteleras durante el invierno, y
por otro, al no haber dinero circulando, se pararon obras y fueron despedidos
cientos de empleados. Los padres de muchos de estos chicos que ayer se abrieron
paso entre la policía y las rejas hacia los supermercados son desempleados
de la construcción, desempleados sin oficio o personal suspendido de la
industria hotelera .
Hace
aproximadamente un mes, el ministro de gobierno Luis Di Giacomo le había
anticipado a Clarín que el gobierno de Alberto Weretilneck estaba
planificando tomar medidas de contención en el Alto de Bariloche demostrando
con esto que en la capital de Río Negro, Viedma, había conciencia de la
situación. Incluso el senador kirchnerista Miguel Pichetto llegó a señalar que
estaba persuadido de llamar a gendarmería para poner orden en los barrios
conflictivos de la ciudad. Ayer el gobernador Weretilnek, indicó a Canal 6 de
Bariloche que los saqueos constituían una “acción organizada, planificada con
la finalidad de generar una situación de convulsión ” en la ciudad. “No
estamos en presencia de hechos que tengan que ver con conflictividad social o
cuestiones que tengan que ver con la supervivencia de la gente, entrar a romper
vidrieras, entrar a robar un televisor o quemar un auto es otro mensaje
”, agregó.
Entre los
manifestantes también corría otra versión de los hechos. El nombre de Sandro
Bonefoi, padre del chico asesinado por la policía durante los disturbios de
2010 en el Alto, y delincuente de amplio prontuario, se escuchó en varias
oportunidades. Se sabe que Bonefoi maneja a varias bandas de jóvenes del barrio
para tareas delictivas. Algunas de ellas, podrían estar detrás de los desmanes.
Su nombre también fue vinculado con el tráfico de drogas, una actividad en la
que, según denuncias públicas, también está involucrada la policía.
Fuente: Clarín 21.12.12
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Los comentarios publicados son de responsabilidad exclusiva de quien los envíe. No siempre refleja nuestra opinión.