Golpizas, gritos de dolor y situaciones fuera
de control en un celular perdido
Los
actos de violencia fueron denunciados por una organización de derechos humanos
que pidió que se proteja a los internos. Son cuatro las filmaciones que
involucran a guardias.
El lugar es oscuro, las voces se
superponen, pero las imágenes no dejan lugar a dudas. Varios penitenciarios
están golpeando a un preso que, además de esposado, se encuentra atado a las
rejas de una ventana. Las patadas y los golpes de puño se suceden sin
interrupción contra “la ratita”, como es identificado el detenido, al que
además califican de “bocón” (en clara referencia a que habría denunciado a
alguien).
Los gritos de dolor del detenido tapan los insultos de los guardianes. Todos levantan la voz, incluso el agente que celular en mano filma la escena que, como nunca antes, trascendieron los altos muros del complejo San Felipe, construcción que se levantó sobre los fondos de la cárcel de Boulogne Sur Mer y donde están detenidos los jóvenes adultos (de entre 18 y 21 años).
Esas terribles escenas forman parte de una de las cuatro filmaciones que ahora están en manos de la Justicia y que fueron tomadas en distintas fechas (la última el pasado 11 de enero) por un penitenciario, el que ya habría sido identificado como Daniel. También hay otras tituladas como: “Fuego para un pucho” y “Milicos en Acción”, musicalizado con la banda de Crónica TV, sobre más de 1.100 imágenes tomadas por un teléfono Nokia, con memoria de 4 Gb.
En otro de los videos se puede ver a, por lo menos cinco funcionarios penitenciarios, en horas de la noche, practicando boxeo y donde claramente se observa una mano ofreciendo plata por uno de los contendientes. Tal vez esos guardiacárceles sean los mismos que, en otro video, aparecen golpeando con puños y patadas a un interno, presumiblemente joven-adulto y que grita de dolor cuando es atacado, sin poder defenderse, en la zona abdominal y en las piernas.
Denuncia
Después de un tiempo en el que se analizaron miles de imágenes (donde también había escenas de sexo, paisajes y detalles del penal), éstas fueron acompañadas por el abogado Diego Lavado, ex subsecretario de Justicia del gobierno de Celso Jaque y presidente de Asociación para la Promoción y Protección de los Derechos Humanos Xumek, al Fiscal de Delitos Complejos en turno, Santiago Garay.
Otro tanto se hizo ante el Ministerio de Gobierno y la Comisión Bicameral de Seguridad de la Legislatura. En todos los casos, se solicitó que “se tomen las medidas de protección pertinentes para resguardar a los internos que se encuentran bajo custodia de ese personal penitenciario que realiza esas prácticas” y que ayer mismo habían sido identificados.
En la presentación, que también se hizo extensiva a la Dirección de Derechos Humanos de la provincia, se hace referencia a que “de la simple observación del contenido de dichos archivos, puede concluirse que nos encontraríamos ante la comisión de graves hechos delictivos”, que deben ser investigados.
Curiosamente, a esa misma hora y a menos de 1.000 metros, en los Tribunales Federales, Rafael Morán, periodista detenido por la dictadura de 1976, revelaba las torturas cometidas contra las personas en aquellos años.
Hace poco más de cuatro meses, en una reunión ante la Corte Interamericana de Derechos Humanos, en la que estuvieron representados los gobiernos nacional y provincial, se pidió el levantamiento de las medidas provisionales que pesaban sobre la cárcel de Mendoza. En esa audiencia celebrada en Quito (Ecuador), el abogado Carlos Varela Álvarez, en nombre de los peticionarios, pidió que no se podían levantar sin nada a cambio.
Sin embargo el organismo internacional resolvió a fin de año que se debían dejar sin efecto las mismas. Ése fue el momento cuando las autoridades provinciales diseñaron un video institucional sobre las mejoras especialmente en San Felipe; con talleres, educación, presos felices y personal óptimo.
Fuente: Eduardo Ayassa - eayassa@losandes.com.ar
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