El puente colgante el 28-01-2010 22 hs.

Estas fotografías nos muestran el puente colgante de Río Cuarto (no habilitado para su uso) con todas las luces encendidas:  A esta imagen la obtuvimos el agobiante viernes 28 de enero cuando la temperatura era realmente infernal   en plena  crisis energética que estamos padeciendo los habitantes no sólo de la ciudad sino de gran parte de la provincia de Córdoba, y constituye una  muestra más de la irracionalidad con que se manejan los funcionarios que nos piden ahorro de energía a los pobladores.

Con más pena que gloria

El primer mes del año concluye para los cordobeses, con un balance netamente negativo, dado que nos tocó soportar una ola de calor agobiante soportando  la falta de energía que  motiva cortes de luz a la sufriente población de la provincia. Entonces la crisis  aparece, esa crisis que cada tanto  apenas  mencionan  nuestros dirigentes,  que se  empeñan  en tratarnos como a criaturas inocentes a los que nos ocultan los males que realmente padecemos.

La ciudadanía no necesita ya que los gobernantes nos hablen de las bondades de sus obras porque el diario vivir nos coloca frente a los hechos incontrastables de la realidad, que habla por sí sola.

Los problemas son sostenidos y recurrentes. Veamos en el año 89 bajo el gobierno de Alfonsín padecimos cortes de energía, no somos quiénes para explicar por qué pero sí somos los que los sufrimos estas situaciones; han pasado 21 años y otro enero nos encuentra en iguales condiciones y en el transcurso hubo apagones fugaces,  y de los otros. Si los veranos son calientes los inviernos son fríos y despiadados con la provisión de gas natural para los  afortunados que accedemos a la red, porque ni se extiende ni cubre las necesidades de todo el país, y lo que es más grave la demanda doméstica se hace en base a restringir el consumo de las industrias con lo que se afecta la producción y las fuentes de trabajo. Pero, de eso no se habla.

No sólo la energía está fallando, durante el transcurso de este primer mes del año suman 41 las víctimas fatales de accidentes de tránsito en la Provincia, una suma bochornosa para un sitio que se publicita en el mundo por las bellezas geográficas e infraestructura para el turismo. ¿No habría que empezar por el principio, y darles rutas a los visitantes y caminos en general en condiciones para toda la población?

La casa grande, la casa de todos que  es el país, demanda inversiones y mantenimiento y sin embargo las obras de infraestructura no se planifican ni ejecutan de acuerdo a políticas de estado,  y si se hacen es en base a conveniencias de los amigos del poder de turno, y en esta última etapa de la democracia como una forma de disciplinar a la tropa provinciana , detrás del modelo K. 

Modus operandi de todo el espectro político, es el ejecutar obra pública para poner en la vidriera de las ofertas electorales, porque lo que tienen bien en claro los políticos de cualquier color político es que a los votos hay que ganarlos con las reglas del mercado de consumo, mostrando lo que se vende.

Hay una falta de rigor en los actos con que se decide el futuro del país, que no resiste el menor análisis. No es momento para frivolidades, la realidad en la cual está comprometida las fuentes de subsistencia laboral, y la salud del pueblo  de Córdoba, merece que la clase dirigente se dedique a sumar esfuerzos para superar este momento, entonces sí creeríamos que les preocupa el pueblo y no sólo los votos para acceder al poder, desde donde radicales y peronistas, alternantes desde el 83 en el gobierno de la provincia y el país, permanentemente esperan los tropezones ajenos para sacar réditos y poco hacen para elaborar políticas con miras al futuro.

Todos conocemos los progresos económicos que hacen los que acceden a los cargos públicos, bien rentados. Los podemos apreciar disfrutando de las mejores condiciones de vida en las capas privilegiadas de la sociedad, pero en medio de tanto confort, creemos que  los déficits de infraestructura los afectarán como nos afectan  a todos.

Entonces  señores gobernantes, más sentido común y responsabilidad con la vida de los semejantes porque básicamente es para cuidar el bienestar de la gente que son gobiernos y no su propio bienestar o bolsillo. Es un reclamo que venimos sosteniendo desde el caldeado enero del 2002, y todavía seguimos esperando gestos de sensatez.

CIUDADANOS AUTOCONVOCADOS DE RIO CUARTO